Tallín, Estonia, Ciudad Cultural Europea 2011

Empezamos a recorrer Tallín, Estonia,  por su plaza central en la que se encuentra el edificio del Ayuntamiento, de estilo gótico tardío con torre octogonal, el único que se conserva vivo en el Norte de Europa.

Y la farmacia que forma parte de la plaza del Ayuntamiento y desde el que se ve el Consistorio es además, una especie de museo, lleno de objetos curiosos y antiguos.

Para entrar al casco antiguo las guías recomiendan hacerlo por la Puerta Viru, que está en el tramo oriental de la muralla de la ciudad. Sus torres de piedra están ligeramente inclinadas, son del s.XIV y la entrada a la calle del mismo nombre, que te lleva al Ayuntamiento.

Paralela a la calle Viru está el pintoresco Pasaje de Santa Catalina junto a la que fue la Iglesia del mismo nombre

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y muy cerca, el Monasterio Dominico, que es uno de los edificios más antiguos de Tallín.

Y para admirar la mejor colección de piezas medievales de Tallín hay que ir a la Iglesia Niguliste. Retablos, trípticos, figuras de piedra y un friso que da que hablar: 'Danza Macabra' de Bernt Notke del s.XV, del que solo se conserva un fragmento del original de 30 m. Cuenta una leyenda que la Iglesia escapó de los saqueos durante las invasiones rusas gracias al ingenio del guardián del edificio que selló sus puertas con plomo fundido.

Subiendo por la Puerta Torre de Pikk Jalg llegamos a la Colina Toompea que data del s.XIII, cuando los daneses levantaron allí un Castillo de piedra y antes de que pasara por multitud de manos.

En la Colina Troompea aún quedan restos de fortificaciones que albergan edificios importantes como el Parlamento, que reside en el edificio del Castillo Toompea y en la que está la torre Pikk Hermann de 50 m. de altura, sobre la que ondea la bandera estonia.

Otro de los edificios relevantes de Toompea es la Catedral Alexander Nevsky, construida por orden del zar Alejando III entre 1894 y 1900. Un edificio neobizantino de ensueño, que domina la plaza del Castillo.

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Cerca de esa Catedral ortodoxa hay otra. La Catedral de Santa María Virgen, que es la más antigua de Estonia. Construida por los daneses en 1240, tiene un exterior gótico y un interior muy interesante: un púlpito barroco, un órgano del 1800, 107 escudos de armas aristocráticas y una hermosa tumba renacentista. Sin desperdicio vamos.

Otros lugares de interés en Tallín son: La Torre Margarita la Gorda. Una entrada a la ciudad que aún se conserva.

La Iglesia de San Olav y su multitud de leyendas respecto a la torre, como que los ciudadanos de la época quisieron que fuera la más alta del mundo para atraer a los comerciantes de todo el mundo. Pero el proyecto fracasó y la torre se vino abajo una y otra vez.

Los restos de sus murallas,

Y el reloj pintado en la pared de la Iglesia del Espíritu Santo, que es el más antiguo que se conserva en Tallín (1300).

Al día siguiente cogimos un ferry a Helsinki, Finlandia. Una jornada para asomarnos a su cultura y saborear su idiosincracia. Ya os cuento...

Fotos: David Sánchez Núñez