La ciudad de Granville está en la región de la Baja Normandía, en la costa de la bahía del Mont St. Michel. Sus maravillosas playas sirvieron de inspiración a los inmortales Victor Hugo y Stendhal -¿habéis leído su obra maestra El Rojo y el Negro? Es de mis libros favoritos!!!-. Su centro histórico bien merece una visita para ir entrando en materia antes de visitar el Museo Jardín dedicado a la obra y persona de Christian Dior.
Christian Dior y su hermana Jaqueline
La niñez de Christian Dior transcurrió en “Les Rhumbs” una casa rodeada de un coloreado jardín al lado del mar, enfrente de las Islas Anglonormandas. De principios de siglo, el lugar es hoy un museo de la moda, el único en toda Francia dedicado a un modisto y donde cada verano, desde 1997, inaugura una muestra dedicada a un aspecto de la herencia de Christian Dior y su firma.
Este verano, para celebrar el 200 aniversario del nacimiento de Jules Barbey d'Aurevilly (1808-1889), que en 1845 definió el dandismo con su trabajo Du dandysme et de Georges Brummel, el museo de Christian Dior presenta la exposición Dandyisms 1808-2008, de Barbey d'Aurevilly a Christian Dior, desde el 1 de mayo hasta el 21 de septiembre. En ella se unen literatura, arte y sociedad para interpretar la influencia de una tendencia social de moda que provino de la Inglaterra del tardío siglo XVIII, y que combinó el refinamiento de la ropa sastre con un espíritu impertinente e irónico.
La muestra ocupa las tres plantas de la casa. En la planta baja hay una exposición retrospectiva del dandismo, con retratos y documentos, accesorios (pajaritas, bastones, sombreros de copa, zapatos...) y ropas clave (chalecos, trajes y levitas), elementos emblemáticos que caracterizan esta moda masculina tan elegante.
También hay una muestra de la “ropa icono” definida por Barbey d'Aurevilly, que perteneció a David Bowie, Honoré de Balzac, Charles Baudelaire, Sacha Guitry, Jean Cocteau -el surrealista que me flipa y del que os hablé en el post del Guggen!!- y Alexis de Redé.
Ya en la primera planta, los magníficos bailes de disfraces, organizados por Christian Dior y sus amigos, son recordados con los vestidos de fantasía diseñados por él para la ocasión. Numerosos objetos sirven para explicar la evolución del espíritu dandy en el tardío siglo XX, caracterizada por un mayor dandismo andrógino, que marcó tendencia en la Casa Dior, pasando de Dior Monsieur a Dior Homme tomando a veces como referencia diseños de mujer, allí expuestos, fruto del trabajo del directivo de arte de la firma, John Galliano, que reinterpreta la elegancia masculina a partir del Renacimiento aportándole así un encanto muy femenino.
Y por supuesto... las fragancias. Por primera vez homenajeándolas en una retrospectiva de más de 200 años que va desde el agua de colonia que usó Napoleón, Vol de Nuit; el homenaje de Guerlain a Santo-Exupéry, hasta el Eau Sauvage de Christian Dior, que revolucionó el mundo del perfume en 1968.
En la última planta, creaciones, bocetos, proyecciones con pases de modelos de las últimas colecciones de Dior conducidas por el gibraltareño Galliano.
¿Qué más os puedo contar? El jardín. Lleno de flores cuyo olor se mezcla con los esencieros estratégicamente repartidos, de todas las fragancias masculinas creadas por la Maison Dior. Una experiencia mística...
Fotos: David Sánchez Núñez/cedidas las antiguas
3 comentarios :
Acabo de descubrir tu blog y...¡me ha encantado!
Pues muchísimas gracias y espero que sigas por aquí cuando quieras.
Bss
;-)
Bonitas fotos, gracias por compartir tu viaje, me ha encantado leerte, no me he leído el libro que comentas, pero lo haré, te lo aseguro! :)
Sigue así guapa!
www.theforeignergirl.blogspot.com.es
Publicar un comentario